Un estudio geohidrológico es un tipo de estudio que se enfoca en la evaluación de los recursos hídricos subterráneos, incluyendo la identificación de fuentes de agua subterránea, su calidad, cantidad, distribución y disponibilidad en una determinada área geográfica.
El objetivo principal de un estudio geohidrológico es el de evaluar la capacidad del acuífero para suministrar agua subterránea de calidad y en cantidad suficiente para satisfacer las necesidades de la población, la agricultura, la industria y otros usos.
Para realizar un estudio geohidrológico, se utilizan técnicas geológicas, hidrológicas e hidrogeológicas, que incluyen la recolección y análisis de datos sobre la geología, topografía, clima, precipitación, características hidrogeológicas, entre otros. También se realizan pruebas de perforación de pozos y muestreo de agua subterránea para determinar la calidad y cantidad de agua disponible.
Aplicaciones:
Los resultados de un estudio geohidrológico son importantes para la planificación del uso del agua subterránea y la gestión sostenible de los recursos hídricos. Esto incluye la identificación de áreas críticas que requieren medidas de conservación, así como la implementación de políticas y estrategias para la protección y manejo adecuado del agua subterránea.